Nunca había leído nada de Paulo Coelho. Tenía la idea equivocada de que era un místico para señoras de cuyos libros se sacaban muchas frases con sentimiento y profundidad que tocaban la linea de flotación.
Pero me decidí a coger Aleph y el brasileño me ha enganchado. He podido leerme en las últimas semanas los 4 que tenía por casa y por este orden Aleph, El Alquimista, El Zahir y El Demonio y la señorita Prym.
Aleph es el más autobiográfico. Tras una crisis de fe, el autor decide hacer un viaje literario en el Transiberiano, de Moscú a Vladivostok Entre otros, con un intérprete y una violinista fan del autor que dice tener una conexión mística con él. Juntos encuentran el Aleph, que es el punto donde se encuentra toda la energía del universo y descubren su conexión en vidas pasadas. A tope de power de profundidad y conexiones místicas.
El Alquimista, de sobras conocido. Delicioso cuento. Seguir lo que dicta el corazón, ir detrás de los sueños y estar atentos a las señales que nos envía el universo. Encontrar y crear nuestra leyenda personal… Todo magia a través de un pastor andaluz en su viaje por el desierto.
El Zahir, el más tipo novela de los 4. Un escritor famoso, pierde a su mujer. Ella desaparece. Lo que para algunos podría ser una suerte para el protagonista es un drama y el comienzo de un análisis interno y de los comportamientos con la persona que amamos. Encontrar el punto de conexión de dos personas en un camino de búsqueda.
Y por último El Demonio y la señorita Prym. Especie de cuento en el que el demonio altera la «paz» de un pequeño pueblo y de la totalidad de sus habitantes. Debate entre el bien y el mal, ¿somos buenos? ¿somos malos? ¿churro? ¿mediamanga? ¿mangotero…
Me gusta como escribe y como se leen sus libros. Lo intensos que son y el análisis que hace del ser humano en cada uno de ellos.
Un místico con salero.
Gato Suave. Ibiza, abril de 2015.